jueves

Bodas(primera parte)


He tenido que poner primera parte porque de las bodas se puede hablar largo y tendido. De lo primero que quiero hablar es de cuando te invitan a una boda. Mi marido tiene una familia extensa, muy extensa. El caso es que todos los primos suyos se casaron en un intervalo de tiempo de dos años, algo así. Rara era la vez en la que no había boda. Socorro. Cuando te llegaba la invitación te echabas a temblar. Dios mío, son primos de mi marido y son hermanos entre ellos: NO PODRÉ LLEVAR NI EL MISMO BOLSO SIN QUE NADIE SE DE CUENTA...Así que vas echando euros para poder ir a la boda. Que si el regalito, el vestuario, peluquería...Ahora que tu madre se pueda quedar con los niños. Porque de lo contrario, tienes que contratar a una canguro. Horror de los horrores. Cuando la boda es de alguien más lejano viene tu suegra diciendo que a ella la han invitado a dicho evento. Tú no respiras hasta que ella dice: "a vosotros no os puede invitar". En esos momentos me comería a la pobre señora de lo feliz que estoy.Lo malo es cuando agrega: "aquí tenéis vuestra invitación". La madre que parió a Paneque. No puede ser, no puede ser...Pero si yo no los invité a mi boda... Da igual, la gente para eso tiene memoria de pez. Os prometo que la próxima vez no cojo una invitación de boda a no ser que venga certificada y con acuse de recibo. En fin, otro día sigo con el tema. No vaya a ser que hablando de esto me llamen para invitarme a otra...
Foto del flickr de CESILGAR.