sábado

Clásicos del porno (Segunda parte)


¡Ay amigos! si venís buscando lo que del título lógicamente se puede deducir, esta vez os habéis equivocado, bueno al final os dejaré unos enlaces que pueden seros útiles y así no me matáis por mentiroso. En realidad lo que quiero comentaros es algo que me tiene fascinado desde hace unas semanas. Resulta que me dio por poner el gadget ese que tenéis al final del blog y que señala la procedencia de los que entran y qué buscaban. En realidad, lo único que pretendía era saber de qué lugares del mundo nos visitáis y hacerme la ilusión de que tengo amigos por medio mundo. Sin embargo, esto ha tenido efectos no previstos, me empiezo a hacer consciente de que un porcentaje muy alto de los que entran vienen atraídos por una entrada que escribí a finales del año pasado y que se titula "Clásicos del porno".
Una de dos, o es que la gente yerra al teclear en Google y cae sin darse cuenta en una entrada que habla de cine para adultos o es que al final va resultar, que uno se puede devanar los sesos pensando sobre qué escribir que sirva como debate, reflexión y patatín, patatán y lo que de verdad, únicamente nos mueve, es lo que nuestra biología animal nos dicta. Va a ser que aunque ahora dispongamos de internet, última tecnología y comodidades miles, seguimos más o menos igual que hace medio millón de años.
Para los que entrasteis engañados, aquí hablan de lo que buscáis:

Enlace


Foto Areito (Flickr)