jueves

¿Y de qué se acuerdan los moribundos?


Yo no sé a vosotros, pero todo lo referente a la muerte me despierta una especie de desasosiego y malestar que evito. Sin embargo, aunque parezca mentira, hay muchas personas que disfrutan con todo lo relacionado con la muerte y no me refiero sólo a los góticos. Aquí en Andalucía ha existido siempre una cultura de la muerte muy arraigada. Hace tan sólo cinco décadas, ir a los pueblos y ver a las mujeres vestidas completamente de negro era lo más natural.
Todo esto viene por algo que me deja confundido, cada vez que alguien describe la muerte de un ser querido hay un detalle que se repite. Lo que dice el moribundo. Suele llamar a su madre o a su padre, como si de un niño se tratara, aunque el futuro difunto sea un anciano.
Es curioso, cómo después de todo, al final de nuestros días lo último que tenemos presente en nuestras cabezas es a nuestros progenitores, como si fuéramos eternos niños.
Incluso Jesucristo llamó a su padre antes de fenecer, al menos eso dice la Biblia.
La foto es de AntolozaZD (Flickr)