jueves

Carta de Ángela a Nicolás

Querido Nicolás:

El griego este se está empeñando en fastidiar pero bien, no contento con pedir y pedir euros, ahora va y dice que  piensa convocar un referéndum para preguntar al pueblo si está o no de acuerdo con lo convenido. Pero ¿qué le pasa? ¿se ha vuelto tarumba? ¿no se da cuenta de que el pueblo no necesita opinar? Ya nosotros sabemos lo que les conviene sin necesidad de que nos lo digan. Por favor, si los griegos son unos inconscientes que jamás han aportado nada al occidente. Esos manirrotos están abriendo un melón que nos puede estallar a todos en las manos. ¿Y si la gente dice que no está de acuerdo con que le recorten cada vez más el estado del bienestar? Los fondos de inversión que tienen deuda de ese país se van a ir al garete y van a dejar de tener los beneficios que han venido enriqueciendo a nuestros millonarios. El sistema se nos puede venir abajo y dejaremos de tener las donaciones que nuestros partidos perciben. ¿Y si les da a los políticos de Portugal, Irlanda o España por preguntar también? La población europea no está aún preparada ni madura para saber lo que necesita y menos mal que nos tienen para orientarles y guiarles. En confianza, Nicolás, el Zapatero este también me da mala espina, de Berlusconi para qué hablar y los ingleses van a su bola.
Confío que entre nosotros dos podamos presionar lo suficiente para que el griego cambie de opinión.
Nos vemos bien pronto,
Aufidersen


Ángela