martes

Póngame un palco

Las hermandades de la semana santa jerezana están muy mal acostumbradas, llevan demasiado tiempo influyendo en ámbitos en los que no deberían haberlo hecho. Y claro, cuando el consistorio, con buen criterio, decide que el gasto de montaje y desmontaje de unos palcos que estas entidades cobran, deben sufragarlo ellas mismas, el jaleo está montado. Ahora se rasgarán las vestiduras, dirán eso tan manido de que ellas contribuyen con labores sociales, que si los beneficios turísticos...etc. Y la verdad es que de unos años a esta parte, los desfiles procesionales tienen cada vez menos seguimiento, la gente prefiere irse a la playa.
Así que si el ayuntamiento no se beneficia económicamente, ¿por qué ha de sostenerlo? Que no se  quejen que tienen toda una ciudad patas abajo durante una semana. Que se sepa, no todos los jerezanos somos capillitas.

Este palco sí que me gusta.